“La tensión de los contrarios”. El “otoño caliente” será por el comienzo del juicio del 1-O, y también, por que el independentismo institucional no tiene hoja de ruta: abandonó la vía unilateral mientras su base social (con creciente desafección) desea desplegar una República. Así Torra eleva el tono contra el Estado y PP y Cs le retroalimentan: ven un filón para rivalizar por liderar la derecha, derivando en que el PSOE/Gobierno vuelve a sufrir la pinza.